AGUA
SAGRADA O EL ESPEJO MÁGICO
I . EL CAMBIO DE PARADIGMA
Alguien dijo que la verdadera filosofía es reaprender a ver el
mundo.
Quizá este sea el mensaje y el misterio que se nos desvela detrás
de
los recientes descubrimientos.
La física cuántica, la biología molecular, los sistemas
matemáticos
avanzados… consiguen explicarnos muchas cosas, pero siempre
nos acaban llevando a un punto donde algo mágico, un misterio,
supera a todas las conocidas leyes y normas científicas supuesta-
mente irrefutables.
“Lo observado depende del espectador”.
¿Y ya está?
¿Nos damos cuenta del tremendo alcance de esta famosa frase que
es
uno de los pilares básicos de los principios de la mecánica
cuántica?
¿Todo depende de todo? ¿El universo es una especie de “super-internet”
galáctico holográfico interconectado con efectos masivos
relativos y
absolutos interdependientes en tiempo real?
Es como decir que la conciencia interviene en el universo,
por el solo hecho de existir como conciencia.
¡Es casi reconocer a la conciencia como una sustancia!
Es el cambio de paradigma universal.
Antes existía una realidad física, tangible y en ella aparecía
la conciencia,
como por arte de magia, o como un maravilloso cúmulo de magníficas
e increíbles coincidencias mecánicas.
Pero ahora, tras el cambio de paradigma, la llamada realidad física
y
la conciencia coexisten y se afectan mutuamente.
Son por tanto interdependientes y probablemente con intersecciones
de magnitudes insospechadas. ¡Han cambiado las reglas del juego!
El poeta reza: “La vida es sueño, y los sueños…
sueños son”.
Pero cuidado, con las nuevas reglas, los sueños tienden a convertirse
en realidad. “Solo soñando, sus sueños pueden
realizarse”.
II . ¿MENSAJES EN UNA BOTELLA?
Y para colmo de males, aparece un noble señor japonés llamado
Masaru Emoto* que dice hablar con el
agua y que asegura además
que esta le contesta, ¡enviándole mensajes para la humanidad!
¿Inverosímil o evidente?
Independientemente de la interpretación de cada uno sobre su fiabilidad
científica, está claro que los fenómenos de resonancia
entre materia
(formación de cristales) y conciencia (mente, palabras, pensamientos)
son explícitos y no dejan lugar a dudas: el agua responde
a lo que
podríamos llamar impulsos de intención o conciencia.
En resumen, a juzgar por las imágenes de los cristales obtenidos
por
Masaru Emoto puede decirse que al agua aparentemente le gusta la
buena música, los niños, la armonía, el buen humor
y las expresiones
de amor incondicional. Parece que el agua, a parte de la ya conocida
cualidad húmeda, cuenta entre sus características desconocidas
con
una extraña y amorosa humanidad.
En lo sutil y metafísico, creo interesante remarcar que es imposible
considerar que la no conciencia emita un mensaje hacia la conciencia.
Por tanto estamos ante una comunicación entre conciencias
o
desde el nuevo paradigma ante una comunicación de fracciones
de
la conciencia universal entre ellas y por tanto de la conciencia
consigo
misma (algunos habrán ya notado que hasta el lenguaje deberá
adaptarse
al cambio de paradigma a veces con expresiones aparentemente irracionales).
Lo que está claro es que Emoto ha rescatado la dignidad de la conciencia,
diciendo:
______ “Lo que usted piensa, siente
y ama tiene un sentido universal
______ más allá de su propia
individualidad”.
Esto además de bonito, es muy esperanzador y coloca a las conciencias
en su lugar, es decir, como protagonistas esenciales del destino individual
y colectivo de su humanidad.
III . INVITACIÓN A AHORAR
Con el nuevo paradigma deberemos inventar y anunciar nuevos vocablos.
El término 'AHORAR' pretende asociar 3 conceptos
que considero claves
para el momento actual de la humanidad y que al final se funden en un
mismo
significado global.
Fonéticamente es una invitación al rezo (a orar), léxicamente
representa el
verbo Ahorar (acción de estar en el presente [ahora] y prestar
atención al mo-
mento) y de forma intuitiva recuerda al conocido término ahorrar,
que bien
entendido nos invita a no desperdiciar nuestras riquezas, es decir, nuestro
poder, nuestra conciencia, nuestro tiempo (referido no solo a cantidad
sino
también a calidad) y nuestra verdadera identidad.
Este nuevo concepto de 'Ahorar' permite además desvincular el termino
'oración' de posiciones exclusivamente religiosas, en ocasiones
interpretadas
de formas demasiado dogmáticas o ritualistas, que a mi entender
desvían
la atención de lo esencial, dificultando acometer una tarea de
evolución
eficiente, en términos espirituales.
Ahorar será pues, a mi entender y por ejemplo,
cualquier acción que nos
permita aprovechar nuestro precioso tiempo en concentrar
nuestra
intención/atención, unificando pensamiento, sentimiento
y emoción
en nuestra conciencia, y dirigiéndola/enfocándola hacia
la evolución
de la humanidad, entendida como un colectivo armónico
con una identidad
surgida de la comunión en la diversidad y de la libertad de cada
individuo.
Ciertamente, si el agua reacciona a nuestras Ahoraciones, disponemos de
abundante material de trabajo, ya sea en nuestros mares, nuestros cielos,
nuestros cuerpos…
Si un sentimiento puede crear la vibración correspondiente a un
bello cristal
en mi interior ¿Qué relación tiene la presencia de
dicha vibración con los
procesos bioquímicos vitales de nuestro cuerpo y qué efectos
puede tener
sobre la funcionalidad de nuestros órganos, los procesos de envejecimiento
y la conservación de la salud?
Todos sabemos que Sonreír, Amar, Confiar, Esperar… es sano,
solo que ahora tenemos una hermosa e inesperada confirmación.
“El poder de la Oración, el poder del Ahora, el poder de
las Palabras
Sagradas, cobran AHORA otro sentido”
IV . HACIA UNA ACTITUD VITAL
El agua en sí misma, parece sugerirnos un camino, una posible senda,
no solo a través de los cristales de Masaru Emoto, sino también
mediante
sus propiedades naturales conocidas por todos. Su mensaje se plasma
en una leve reverencia, una sencilla invitación hacia una actitud
vital,
hacia algo que yo no llamaría normas ni leyes, sino más
bien actitudes
o tendencias favorables.
¿Y si intentamos jugar a ser como el Agua?
Podemos por ejemplo ser adaptables y fluir siempre con suavidad,
puliendo cantos, protegiendo el entorno y evitando sobreesfuerzos inútiles,
ya que cuando el agua tiene que pasar por un sitio, es sabido que al final
lo hace, tarde o temprano, y no es necesario forzar, sino más bien
ablandar...
Podemos ser transparentes y puros y tener capacidad de dar vida y energía,
de forma natural. Podemos tener un gran poder de cohesión interna
(firmeza)
y una apariencia más discreta, fluida, suave, exenta de rigidez.
Podemos saciar la sed del sediento, de forma generosa y sin dejar de existir
por ello, sino solidarizándonos, uniéndonos y comunicándonos
la información
que no es secreta pero sí está mágicamente oculta.
Podemos ser los mejores disolventes de problemas y encrucijadas y no por
ello pisar la identidad y diversidad de cada una de las orillas del río.
Podemos ser implacables e impecables y no permitir que nos desvíen
de
nuestro curso natural, no transigiendo a los grandes trasvases manipuladores,
evitando la injusticia y la especulación.
Podemos auto-regenerarnos y estar constantemente en movimiento,
si no es por fuera es por dentro, creando verdaderos vórtices donde
la energía "libre" al fin se manifieste en forma de frutos
insospechados...
Podemos ser generosos y divertidos, alegres y cantarines, danzantes,
amorosos y cariñosos, sinceros, humildes, valientes y nobles,
lúcidos y profundos...
Bien, de lo único que estoy seguro es de que Podemos...
Os envío un baile, un guiño, y a Pepito Grillo,
que es la voz de mi Conciencia...
Gracias a todos por haber llegado hasta aquí.
2006
Pako Granés
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